Valenciano de nacimiento, Ricardo Botella ingresó en las categorías inferiores del Valencia CF, donde destacó como medio defensivo, hasta llegar al filial en 1992. Tenía 21 años, y destacaba por su fortaleza física, lo cual le hacía también elegible para jugar como defensa central. Tenía además una buena llegada y remate de cabeza, lo cual le permitía presentar una buena tarjeta como goleador. En sus dos primeras temporadas con el Mestalla, marcó 8 goles, destacando especialmente el hat-trick que le hizo al Alcoyano el 31 de enero de 1993. Entre 1992 y 1994, era titular indiscutible con el segundo equipo, disputando un total de 66 partidos en la categoría de bronce del fútbol español.

En 1994, a sus 23 años, Ricardo estaba preparado para dar el salto al primer equipo, pero la competencia en el centro del campo era enorme. Parreira le hizo debutar en la pretemporada contra el Elche, y se lo llevó a Vigo en noviembre para disputar el Trofeo Citroen Evasión contra el Celta y el Real Madrid, donde fue titular en ambos partidos. Debutó en competición oficial en la eliminatoria de Copa contra el Corralejo, saliendo como titular en el partido de ida disputado en Canarias el 04 de enero de 1995, pero a partir de ahí no llegaron más oportunidades. Se aburrió de esperar y optó por la retirada.