Ficha de Romario de Souza
Nombre completo: Romario de Souza Faria
Fecha de nacimiento: 29/01/1966
Lugar de nacimiento: Rio de Janeiro
Nacionalidad: Brasil
Altura / Peso: 1,69 m. / 72 Kg.
Títulos:
Ninguno
Debut: 08/08/1996 (PSV Eindhoven)
Biografía
La relación de Romario con el Valencia da para escribir un libro. Hablamos, indudablemente, de una leyenda en el mundo del fútbol, cuya técnica y capacidad goleadora fue equiparable a la del mismo Pelé. Vino a Mestalla con el PSV Einhoven para el homenaje a Kempes en 1993. Marcó tres goles, dio dos asistencias y maravilló a la grada, que pidió a gritos su fichaje, pero finalmente se fue al Barcelona, donde se consagró a nivel mundial. Cuando el Valencia de Roig finalmente lo fichó, en 1996, todos los astros se alinearon para impedir que triunfara aquí.
Romario debutó como profesional a los 19 años en el Vasco de Gama, donde estuvo entre 1985 y 1988, siendo en dos ocasiones máximo goleador del Campeonato Brasileño. En 1988 fue fichado por el PSV Eindhoven, donde permaneció hasta 1993, marcando 165 goles en 163 partidos, conquistando tres Ligas, dos Copas y tres Pichichis en la Liga holandesa. El 14 de julio de 1993, Romario es traspasado al FC Barcelona a cambio de 10 millones de dólares. Allí hizo 30 goles en la Liga de 1994 y se proclamó campeón del Mundo con Brasil, pero la temporada siguiente Cruyff fue incapaz de domarlo, y terminó marchando al Flamengo en 1995, con el que marcaría 59 goles en 59 partidos, convirtiéndose en el máximo goleador del torneo en 1996.
Ese verano, Francisco Roig quiso poner con su fichaje la guinda a su ambicioso proyecto. Llegó a Mestalla rodeado de una tremenda expectación, pero a cargo del equipo se encontraba Luis Aragonés, quien fiel a su estilo de meritocracia, acabó teniendo diversos enfrentamientos con el jugador, algunos de ellos durante los entrenamientos que dieron la vuelta al mundo. Pese a su buen rendimiento goleador, Romario marchó cedido de nuevo al Flamengo por petición expresa del entrenador. Aragonés, disconforme con las decisiones del presidente, terminó presentando su dimisión, y el Valencia contrató, en marzo de 1997, a Jorge Valdano.
Parecía que el destino de Romario cambiaba de golpe, ya que el técnico argentino era un admirador devoto y confeso del delantero brasileño, al que calificaba, literalmente, como «jugador de dibujos animados». Volvió a Mestalla en un gran estado de forma, y en los partidos de pretemporada demostró sus ganas de triunfar en el nuevo Valencia marcando un buen número de goles. Pero la mala suerte se le apareció en forma de lesión para jugarle una mala pasada. Fue precisamente ante su ex-equipo, el Flamengo, cuando después de marcar un gol antológico, tuvo que retirarse lesionado.
La lesión le tuvo apartado de los terrenos de juego durante un mes, tiempo suficiente para que Francisco Roig despidiera al técnico argentino debido a los malos resultados cosechados. La llegada del nuevo técnico, Claudio Ranieri, supuso la vuelta a los enfrentamientos y a salir de las alineaciones iniciales. Para Romario era un peligro, ya que era año de mundial, por lo que fue traspasado de nuevo al Flamengo. Para la historia queda la incógnita de qué habría sucedido de haber continuado Valdano y de haber podido disponer de un Romario extramotivado, pero esto es algo que nunca podremos saber.
De vuelta en Brasil, continuó jugando al máximo nivel durante muchos años. Pasó por diversos equipos locales (Vasco da Gama, Fluminense, América) y extranjeros (Al-Sadd, Miami, Adelaide), y convirtió la cifra de 1.000 goles en partidos oficiales en una auténtica obsesión que no paró de buscar y que consiguió el 20 de mayo de 2007, convirtiéndose ya en una leyenda del fútbol mundial. En abril de 2008, Romario anunció su retirada del fútbol profesional a los 42 años de edad, aunque aún volvió en 2009 para jugar una temporada con el América de Río. Tras retirarse, Romario se dedicó a la política y llegó a ser diputado por Río de Janeiro en la Cámara de Brasil.
Romario debutó como profesional a los 19 años en el Vasco de Gama, donde estuvo entre 1985 y 1988, siendo en dos ocasiones máximo goleador del Campeonato Brasileño. En 1988 fue fichado por el PSV Eindhoven, donde permaneció hasta 1993, marcando 165 goles en 163 partidos, conquistando tres Ligas, dos Copas y tres Pichichis en la Liga holandesa. El 14 de julio de 1993, Romario es traspasado al FC Barcelona a cambio de 10 millones de dólares. Allí hizo 30 goles en la Liga de 1994 y se proclamó campeón del Mundo con Brasil, pero la temporada siguiente Cruyff fue incapaz de domarlo, y terminó marchando al Flamengo en 1995, con el que marcaría 59 goles en 59 partidos, convirtiéndose en el máximo goleador del torneo en 1996.
Ese verano, Francisco Roig quiso poner con su fichaje la guinda a su ambicioso proyecto. Llegó a Mestalla rodeado de una tremenda expectación, pero a cargo del equipo se encontraba Luis Aragonés, quien fiel a su estilo de meritocracia, acabó teniendo diversos enfrentamientos con el jugador, algunos de ellos durante los entrenamientos que dieron la vuelta al mundo. Pese a su buen rendimiento goleador, Romario marchó cedido de nuevo al Flamengo por petición expresa del entrenador. Aragonés, disconforme con las decisiones del presidente, terminó presentando su dimisión, y el Valencia contrató, en marzo de 1997, a Jorge Valdano.
Parecía que el destino de Romario cambiaba de golpe, ya que el técnico argentino era un admirador devoto y confeso del delantero brasileño, al que calificaba, literalmente, como «jugador de dibujos animados». Volvió a Mestalla en un gran estado de forma, y en los partidos de pretemporada demostró sus ganas de triunfar en el nuevo Valencia marcando un buen número de goles. Pero la mala suerte se le apareció en forma de lesión para jugarle una mala pasada. Fue precisamente ante su ex-equipo, el Flamengo, cuando después de marcar un gol antológico, tuvo que retirarse lesionado.
La lesión le tuvo apartado de los terrenos de juego durante un mes, tiempo suficiente para que Francisco Roig despidiera al técnico argentino debido a los malos resultados cosechados. La llegada del nuevo técnico, Claudio Ranieri, supuso la vuelta a los enfrentamientos y a salir de las alineaciones iniciales. Para Romario era un peligro, ya que era año de mundial, por lo que fue traspasado de nuevo al Flamengo. Para la historia queda la incógnita de qué habría sucedido de haber continuado Valdano y de haber podido disponer de un Romario extramotivado, pero esto es algo que nunca podremos saber.
De vuelta en Brasil, continuó jugando al máximo nivel durante muchos años. Pasó por diversos equipos locales (Vasco da Gama, Fluminense, América) y extranjeros (Al-Sadd, Miami, Adelaide), y convirtió la cifra de 1.000 goles en partidos oficiales en una auténtica obsesión que no paró de buscar y que consiguió el 20 de mayo de 2007, convirtiéndose ya en una leyenda del fútbol mundial. En abril de 2008, Romario anunció su retirada del fútbol profesional a los 42 años de edad, aunque aún volvió en 2009 para jugar una temporada con el América de Río. Tras retirarse, Romario se dedicó a la política y llegó a ser diputado por Río de Janeiro en la Cámara de Brasil.
Posición
Otros equipos
Vasco de Gama, PSV Eindhoven, FC Barcelona, Flamengo, Fluminense FC, Al-Sadd Sports Club, Miami FC, Adelaide United
Récords
Mís goles:Palmeiras (3 goles)
Más partidos: Hércules CF (2 partidos)
Más tarjetas: CP Mérida (1 amarillas)
Más expulsiones: Ninguna
Edad debut: 30,55 años (PSV Eindhoven)
Edad 1º gol: 30,55 años (FC Colonia)
Edad ult. gol: 31,77 años (Hércules CF)
Edad ult. part.: 31,82 años (Real Betis)