Ficha de partido
Real Valladolid
2 - 2
Valencia CF
Equipos titulares
5
10
11
Sustituciones
Ninguno
Timeline del partido
Inicio del partido
0'
Jesús Navarro
32'
Jesús NavarroAsist: Antonio Sánchez
35'
Descanso
45'
LópezPenalty fallado
55'
San Miguel
62'
Sañudo
85'
Final del partido
90'
Estadio
Rival: Real Valladolid
Records vs Real Valladolid
Máximo goleador: Fernando Gómez (9 goles)
Goleador rival: Morro (4 goles)
Más partidos: Vicente Seguí (21 partidos)
Mayor victoria: 6 - 0 (22.03.1964)
Mayor derrota: 0 - 4 (30.09.1956)
Más repetido: 1-1 (14 veces)
Crónica
Con gran entrada se celebró ayer este partido, que ha resultado interesante. Los valencianos han jugado mejor y han dominado más que los locales, pero éstos han aprovechado con más fortuna sus avances, y eso que han desperdiciado un penalty, que, demasiado colocado por López, fue parado difícilmente por Nebot y no pudo aquél rematar a las mallas.
En la primera parte, Navarro, del equipo valenciano, marcó los dos tantos; el primero, a los treinta y dos minutos, haciéndose con el balón y driblando a los contrarios; falla Luisón y aquél pega en el ángulo, rebotando hacia dentro. El segundo tanto lo marcó dos o tres minutos más tarde al rematar una falta sacada por Sánchez.
Los valencianos han merecido ganar por juego. Violentos, corajudos y llevando el partido a un tren que no resistían los castellanos, se han entendido a maravilla. Especialmente el ala Torredeflot-Navarro originó ocasiones peligrosísimas, que no tuvieron el resultado que merecían por la enérgica y buena actuación del guardameta. Las otras líneas (media y defensiva), así como Nebot. también actuaron muy bien.
El Valladolid jugó, en cambio, a la deriva, siguiendo el juego que imponían los levantinos. Ha sido uno de los peores partidos jugados por los vallisoletanos, o, si se quiere, ha sido el Valencia uno de los peores enemigos con quienes han tenido que habérselas en esta temporada nuestros paisanos.
Se presentó en este partido el antiguo jugador del Valladolid Deportivo, Penco, hermano de San Miguel, a quien se lenota el tiempo que falta del campo futbolístico en partidos de este calibre. El arbitro, señor Iturralde, merece párrafo aparte. La ya vieja costumbre de hablar mal de los del silbato da más valor al cálido aplauso que se le debe y a las manifestaciones espontáneaas hechas en su favor a la terminación del partido. En realidad,
ha sido un arbitraje, como se dice, "de bandera". Iturralde estuvo enérgico, imparcial y siempre justo en sus fallos.
En la primera parte, Navarro, del equipo valenciano, marcó los dos tantos; el primero, a los treinta y dos minutos, haciéndose con el balón y driblando a los contrarios; falla Luisón y aquél pega en el ángulo, rebotando hacia dentro. El segundo tanto lo marcó dos o tres minutos más tarde al rematar una falta sacada por Sánchez.
Los valencianos han merecido ganar por juego. Violentos, corajudos y llevando el partido a un tren que no resistían los castellanos, se han entendido a maravilla. Especialmente el ala Torredeflot-Navarro originó ocasiones peligrosísimas, que no tuvieron el resultado que merecían por la enérgica y buena actuación del guardameta. Las otras líneas (media y defensiva), así como Nebot. también actuaron muy bien.
El Valladolid jugó, en cambio, a la deriva, siguiendo el juego que imponían los levantinos. Ha sido uno de los peores partidos jugados por los vallisoletanos, o, si se quiere, ha sido el Valencia uno de los peores enemigos con quienes han tenido que habérselas en esta temporada nuestros paisanos.
Se presentó en este partido el antiguo jugador del Valladolid Deportivo, Penco, hermano de San Miguel, a quien se lenota el tiempo que falta del campo futbolístico en partidos de este calibre. El arbitro, señor Iturralde, merece párrafo aparte. La ya vieja costumbre de hablar mal de los del silbato da más valor al cálido aplauso que se le debe y a las manifestaciones espontáneaas hechas en su favor a la terminación del partido. En realidad,
ha sido un arbitraje, como se dice, "de bandera". Iturralde estuvo enérgico, imparcial y siempre justo en sus fallos.