Inicio del partido

0'

Cuesta

30'

Descanso

45'

Del Coso

58'

Del Coso

74'

Final del partido

90'

Los veintidós futbolistas, con arte y maña, consiguieron resolver el problema de dejar transcurrir noventa minutos, dando terribles patadas al infeliz esférico que tuvo que soportar el encuentro de Vallecas. Pero si la pelota sufrió resignada la gran batuda, los espectadores no fuimos menos desgraciados.

El Athletic, a pesar de su triunfo, hizo el más flojo partido de los que llevamos presenciando en los últimos tiempos, y el Valencia, dominado por el aire durante el primer tiempo, no supo reaccionar en la segunda parte, cuando le correspondió la gran ventaja del viento. Total, que si al principio se limitó la defensa mediterránea a contener con tesón los ataques centrales, en la continuación no hubo ni eso.

Apuntado lo anterior, sobra una descripción detallada del match. El Athletic, dueño de la situación en la primera parte, favorecido por el fuerte viento, no logró vencer la resistencia defensiva valenciana, única línea de juego acertado entre los forasteros, y sólo cerca de la media hora Marín acertó a pasar a Cuesta, desmarcado y sobre la meta, y éste pudo cruzar a placer el primer tanto.

Parecía lógico que un equipo como el Valencia, que en la primera parte, contra el fuerte viento, se había defendido hábilmente, llevara la iniciativa, contando a su turno con todas las ventajas. Pero fue lo contrario. Desmayados los delanteros, flojos los medios y excesivamente recargado el trabajo de los defensas, el Athletic consiguió marcar dos nuevos tantos en remates poco brillantes de Del Coso, que tuvo un feliz debut si se atiende a los tantos marcados, y vulgar si se refiere a la colaboración prestada al conjunto.de su ataque.

El Valencia no tiene delanteros, porque el extremo derecha no es suficiente para llevar la sensación de peligro a una línea de medios y a una defensa de mediana clase. El trío Imossi, Salvador, Amorós está lejos del valer de aquella otra línea que fue casi internacional. La defensa es lo más seguro y diestro, y en la puerta, Cano es el mejor jugador de los merengues.

Del Athletic, flojo como conjunto. Hiera el mejor. Los debutantes, Cabezo y Del Coso, vulgares, en una acción poco decisiva y que no tuvo casi nunca fases de peligro. El arbitraje, de Vilalta, con fases de incertidumbre, errores frecuentes y atisbos raros de acierto, protestado en general.