Inicio del partido

0'

Eduardo CubellsPenalty fallado

30'

Descanso

45'

Benito RocaPenalty fallado

70'

Final del partido

90'

Es verdaderamente sorprendente el resultado obtenido por el Valencia FC con el España, y que se presta a múltiples comentarios. ¿Cómo explicar la espantosa anomalía de scores que ha conseguido el primer equipo del Valencia, venciendo al Esparta, al Morawska, al Barcelona, y quedando en ridículo ante un Gracia, un Júpiter, un Martinenc, y ahora el España? ¿Qué confianza pueden llevar sus partidarios ante ningún encuentro de compromiso, cotejando estos altibajos, impropios de jugadores de verdad? ¿Tendremos que opinar que es el Valencia un equipo falto de técnica, de juego, de precisión, sujeto a los vaivenes de la suerte?

Mas, ¿cómo, si recordamos aquella tarde del Esparta, aquella primera del Morawska o aquellas dos del Barcelona? Hay que reconocer que lo único que les falta a ciertos ídolos valencianistas es dignidad, amor propio, consecuencia con sus ideales y cariño al Club. De ahí que, ante un enemigo inferior se sonrían con mueca de ombipotentes, despreciando miserablemente los primeros minutos y perdiendo ocasiones que luego no logran conseguir. Y es lástima que precisamente falten en est olos valencianos. Recordad, si no, los que presenciasteis el partido que vamos a relatar brevemente, las palabras con que Roca animó a los compañeros al comienzo del encuentro, cuando vio su apatía: «Acordaos -decía- que jugamos campeonato».

Y entre tanto el España se crecía, se multiplicaba, y si bien no halló posible la perforación de la meta valenciana, gracias al señor Piquer (pitó 16 offsides), al menos impidió que fuera traspasado su marco, a pesar de los titánicos esfuerzos de los merengues en la última media hora. El partido fue un continuo asedio a la puerta españista, donde se estrellaban los avances valencianistas ante Llácer, Redondo y Esteve, que tuvieron una actuación sencillamente colosal. Creo que no será éste el primer susto que ocasione el España en el actual campeonato. En la delantera destaca Bolás, como elemento de mucho peligro.

La defensa y medios del Valencia jugaron excelentemente. Sobre todo Reyes y Molina tuvieron una actuación lucida; pero, la delantera, la tan endiosada delantera... aquel Montes, el gran Tello, aquel Peral, el excelso, no lograron con su excelsitud ni internacionalidad perforar la red de un equipo, al fin y al cabo, finalista del grupo B del año pasado. ¿Y para esto tanta excelsitud y tanto postín? Pero... no es culpa de elos... Si la directiva no los consintiera estos gestos de niños mimados, de ases insustituibles, de indispensables, otro gallo les cantaría. El hecho es que aún con dos penalties, tirados por Cubells y Roca, uno de ellos completamente imaginario, y tres minutos antes de terminar, no pudieron vencer en el campo del España. Del Valencia, los mejores, Piquer, Reyes y Molina. Del España, insuperables Llácer, Esteve y Bolás.