Ficha de partido: 20.03.1993: Valencia CF 3 - 4 FC Barcelona

Ficha de partido

Valencia CF
Valencia CF
3 - 4
FC Barcelona
FC Barcelona

Equipos titulares

Timeline del partido

escudo local
Inicio del partido
0'
escudo visitante
Nadal
2'
José Manuel Sempere
11'
Eusebio
21'
Quique Flores
28'
Lubo Penev (Pen.)
35'
Fernando Giner
37'
Descanso
45'
Carlos Arroyo
47'
Fernando GómezAsist: Lubo Penev
47'
Beguiristain
53'
Koeman
58'
Laudrup
64'
Eloy OlayaCarlos Arroyo
65'
Fernando Gómez
70'
Juan SánchezMiodrag Belodedici
74'
Álvaro Cervera (Falta)
75'
Julio SalinasStoichkov
77'
Bakero
87'
Julio Salinas
88'
AlexancoBakero
89'
Álvaro Cervera
89'
Final del partido
90'

Estadio



Nombre: Mestalla
Aforo: 55.000 espectadores
Ubicación: Valencia (Valencia) 
Inauguración: 20/05/1923

Rival: FC Barcelona

Records vs FC Barcelona

Máximo goleador: Mundo Suárez (18 goles)
Goleador rival: Messi (31 goles)
Mayor victoria: 4 - 0 (18.04.1979)
Mayor derrota: 0 - 7 (03.02.2016)
Más repetido: 1-1 (36 veces)

Crónica

El Barça rompió una racha de siete años sin conocer la victoria en el Luis Casanova. Lo hizo a lo grande con un triunfo espectacular y un resultado de otros tiempos. El equipo azulgrana bordó el fútbol de ataque y exhibió una ambición de futuro campeón. Supo remontar un 2-1 en contra en momentos realmente difíciles y no se conformó luego con el 3—3, que campeaba en el marcador en los compases finales del choque de forma que parecía irreversible. Fue posiblemente el mejor triunfo del Barça en esta Liga, lejos del Camp Nou. Y llegó en un campo y en un momento del Campeonato que coloca al equipo de Cruyff no sólo en situación de sólido líder, sino también como candidato más firme al título por juego, moral y trayectoria.

El Barça tuvo un arranque de partido magnífico, con un total dominio de la zona ancha y del control del balón que le permitió inaugurar el marcador en su primera acción ofensiva. Una perfecta combinación entre Nadal y Bakero al primer toque que dejó solo al comodín barcelonista para que ubicara el balón lejos del alcance de Sempere cuando éste iniciaba la salida de su portería. Fueron veinte minutos azulgrana soberbios, con estampa de campeón y combinaciones siempre en vertical que llevaron repetidos peligros al marco valencianista.

El gol rondó el área local, pero ni Laudrup ni Stoichkov acertaron en el momento final del remate y no se concretó el 0-2 que pudo sentenciar el encuentro en su primera fase. Poco a poco el juego se endureció y aunque el árbitro mostró tres tarjetas consecutivas al Valencia, Alvaro, Arroyo y Quique, lo cierto es que los hombre sde Hiddink supieron romper la hegemonía azulgrana en la zona ancha con un buen pressing y, sobre todo, con la explotación de las bandas, donde Goikoetxea y Eusebio se veían desbordados por las subidas de Leonardo, Alvaro y Quique. El primer aviso fue un centro de Arroyo que no encontró rematador, pero en el minuto 37 Begiristain perdió un balón que se llevó Arroyo al interior del área entre un bosque de contrarios. Goikoetxea puso el pie ingenuamente y la caída del delantero valencianista fue sancionada con un justo penalty que Penev transformó en el primer empate.

Con el termómetro del encuentro al rojo vivo, poco después, el propio Penev se coló solo hacia el marco de Zubi y estrelló en el poste una clarísima oportunidad. Pero para que el equilibrio fuera patente, Txiki, también solo ante el portero, desperdició una ocasión de oro justo momentos antes de señalarse el fin del primer tiempo. Un primer tiempo magnífico de alternativas, equilibrio y ambición por parte de los dos equipos, que, sin embargo, sólo sería un pálido prólogo de lo que vendría después.

Fortalecido en su moral por el empate y por haber salido bien librado del magnífico primer tiempo barcelonista, el Valencia reanudó el juego a tope de fuerza y velocidad y, a los dos minutos, Fernando colocaba a su equipo con ventaja en el marcador gracias a un magnífico servicio de Penev desde la derecha. El capitán valencianista ganó la posición a Koeman y batió a Zubi con un tiro inapelable. El Barça, por momentos, parecía haber caído en un pozo y que el encuentro iba a sufrir un cambio de decorado brutal. Poco después el Valencia probaba fortuna con un par de amenazadores remates y el Luis Casanova vibraba como si de una final se tratase. Sin embargo, en el momento cumbre de la euforia local, Laudrup dejó enmudecido el estadio con un servicio magistral en profundidad sobre Begiristain, quien, esta vez sí, controló el balón y largó un zurdazo impresionante que se coló por toda la escuadra. Era el 2-2 que dejaba patente que el Barça no había doblado la rodilla.

Apenas diez minutos más y el propio Laudrup culminaba una gran acción de Amor por la derecha con un cabezazo a la red que disparaba la euforia barcelonista. Volvía a ser el equipo de los primeros momentos. Una velocidad endiablada y un poder realizador letal. Desde aquel momento, el control del partido fue enteramente barcelonista, aunque Álvaro devolviera la euforia a los graderíos momentáneamente con un gol de bandera, en lanzamiento de falta que sorprendió a Zubizarreta. El portero esperaba un centro y el delantero le coló el balón por la escuadra del primer poste. Era la rúbrica a un partido extraordinario, pero que no había terminado. Hiddink había sacrificado un defensa, Belodedici, para dar entrada a un jugador más ofensivo como el joven Sánchez, antes del 2—2. Lo lamentaría.

Desflecado físicamente y con enormes grietas defensivas, el Valencia no presentó más batalla y en los últimos compases sólo el Barça buscó el triunfo. Tras un malentendido entre Sempere y su defensa, fue a la salida de un córner cuando llegó la explosión más inenarrable del triunfo. Bakero se anticipó a la salida del portero y desvió con la cabeza la red el cuarto gol azulgrana. Era el minuto 87 y Valencia se rendía a un Barça que rompe estadísticas con imagen de campeón.