Ficha de partido: 06.02.1992: Real Madrid 2 - 1 Valencia CF

Ficha de partido

Real Madrid
Real Madrid
2 - 1
Valencia CF
Valencia CF

Equipos titulares

Timeline del partido

escudo local
Inicio del partido
0'
escudo visitante
Hagi
15'
Michel
18'
Butragueño
22'
Roberto Fernández
23'
Hierro
31'
Leonardo de Araujo
40'
Descanso
45'
Villarroya
57'
AldanaAlfonso
59'
Lubo Penev
66'
Chendo
71'
Lubo Penev (Falta)
75'
Michel
84'
Ricardo AriasEloy Olaya
89'
Roberto Fernández
91'
Final del partido
92'

Estadio



Nombre: Santiago Bernabéu
Aforo: 85.454 espectadores
Ubicación: Madrid (Madrid) 
Inauguración: 14/12/1947

Rival: Real Madrid

Records vs Real Madrid

Máximo goleador: Mundo Suárez (13 goles)
Goleador rival: Raúl (17 goles)
Mayor victoria: 6 - 0 (09.06.1999)
Mayor derrota: 1 - 7 (23.08.1990)
Más repetido: 1-2 (27 veces)

Crónica

Buena entrada en el Estadio Santiago Bernabeu. Antes de iniciarse este encuentro de ida de cuartos de final de la Copa del Rey se guardó un minuto de silencio por las víctimas del atentado terrorista de la mañana en Madrid. El Real emitió un comunicado sobre el "caso Fran" confirmando que obra en su poder un precontrato del jugador coruñés. Dirigió la contienda el colegiado asturiano Díaz Vega, que estuvo bien. Amonestó a Hagi, Hierro, Villarroya, Chendo y Michel por el Real Madrid y por el Valencia a Leonardo, Penev y Roberto, dos veces por lo que fue expulsado en el minuto 91 de partido.

Goles: 1-0, minuto 18. Buena asistencia de Hagi desde la izquierda hacia Michel que, libre de marcaje, empalma un fuerte tiro a la red. 2-0, minuto 22. Butragueño realiza una excelente jugada individual y coloca el balón junto al poste izquierdo del portal valenciano. 2-1, minuto 75. Penev transforma con la zurda un libre directo al borde del área madrileña con un disparo que se cuela por la escuadra.

El Real Madrid revivió en la noche copera ante el Valencia. Con una primera media hora en la que jugó a placer, el equipo de Leo Beenhakker se puso en ventaja con dos golazos de Michel y Butragueño, para acabar sufriendo frente a un equipo desconcertante y bronco. Un tiro libre de Penev supuso el 2-1 que le da al Valencia alguna posibilidad de seguir adelante en la competición. El regreso del holandés Guus Hiddink al Santiago Bernabéu (pasó años atrás como entrenador del PSV Eindhoven) no tuvo un final feliz para el técnico. Aunque tampoco puede hablarse de desgracia: el Madrid tendrá que sufrir mucho aún para solventar la eliminatoria, porque ya demostró en su visita liguera que el Luis Casanova no se le da nada bien.

La escasa afición blanca del Bernabéu se sacudió el frío con un golazo de Michel, que recibió una perfecta asistencia de Hagi desde la izquierda y empalmó como venía un derechazo que se clavó en la base del travesaño valencianista. El 1-0 llegó sin que el Valencia se enterara siquiera de qué iba la película, como quien llega al cine diez minutos después de apagadas las luces. Pero peor fue con el 2-0, obra magistral de Butragueño. El "Niño" encaró el área sobre la izquierda, se fue entre Boro y Tomás y, cuando le salían otros dos defensas, levantó la cabeza y ajustó un derechazo junto al poste izquierdo.

Sempere se estiró en vano, el "Buitre" ya se había girado y celebraba con su fría ceremonia de siempre, mientras en los graderíos la afición le dedicaba sombrerazos y una ovación de gala. Se esperaba un festival, pero el partido se fue poniendo duro. Patada va, patada viene, el Valencia se rearmó en defensa gracias a la aspereza de todos sus componentes. Desde Camarasa hasta Eloy, y muy especialmente Roberto, que se fue a la ducha antes de tiempo, cada uno de los integrantes del equipo de Hiddink se empleó a fondo para intentar lo que parecía imposible, frenar al Madrid y encarrilar el partido copero.

Y lo hicieron. A trompicones, pero lo hicieron. Beenhakker ayudó: mandó a Alfonso al vestuario y en su lugar puso a Aldana ganándose el repudio de las gradas. El Madrid perdió peso adelante, y Butragueño, ahora más solo, debió echarse atrás para recibir más cómodamente. Y llegó el 2-1, obra magistral de Penev, que ajustó un tiro libre de zurda a una escuadra como lo hacen los que saben. Claro que la historia pudo cambiar un minuto antes, a los 30 del segundo tiempo, si Hagi no hubiese encontrado la oposición de Sempere, que desvió su zurdazo a córner. Pero no ocurrió, y pese a haber revivido en parte, el Madrid deberá esforzarse mucho para seguir en la Copa.