Ficha de partido

Valencia CF
2 - 1
Real Valladolid

Equipos titulares
Sustituciones
Timeline del partido

Inicio del partido
0'

Sixto CasabonaManuel Sánchez Torres
19'
Eusebio
25'
Descanso
45'
Sixto Casabona (Pen.)
56'
José Vicente CuxartMiguel Tendillo
71'
NavajasAravena
71'
Sixto Casabona (Pen.)
74'
AravenaPenalty fallado
89'
Final del partido
90'
Estadio
Rival: Real Valladolid
Records vs Real Valladolid
Máximo goleador: Fernando Gómez (9 goles)
Goleador rival: Morro (4 goles)
Más partidos: Vicente Seguí (21 partidos)
Mayor victoria: 6 - 0 (22.03.1964)
Mayor derrota: 0 - 4 (30.09.1956)
Más repetido: 1-1 (14 veces)
Crónica
El Valencia se impuso al Real Valladolid en el primer partido de Liga disputado en el Luis Casanova, en un encuentro en el que Sempere detuvo un penalty, salvando a los suyos de un naufragio seguro, y el equipo che remontó gracias a otras dos penas máximas. Buena actuación del aragonés Calvo Córdoba, que no mostró tarjeta alguna.
Goles: 0-1: Minuto 27. Se cuela Yáñez dentro del área de castigo, burla la salida de Sempere y cede a Eusebio que fusila el gol. 1-1: Minuto 55. Sixto envía a Quique y este es derribado por el defensa visitante Jorge dentro del área. El consiguiente penalty lo transforma Sixto. 2-1: Minuto 83. Jugada muy elaborada de la delantera che que se inicia en Sixto. Salida de Fenoy y el balón que finalmente cabecea Urruti es repelido con la mano por Andruna cuando ya entraba en la portería. El penalty es transformado nuevamente por Sixto.
Resulta obligado hablar de un partido de dos caras y de un Valencia que, no obstante la victoria, parece destinado a sufrir a la vista de sus defectos y de su inexperiencia. Esta vez pudo levantar el partido porque la suerte se alió con el titular del Luis Casanova y provocar en las gradas un falso delirio cuando Sixto transformó el segundo penalty con que fue castigado el Valladolid, pero no hay pasar por alto un primer tiempo deprimente y de idéntico festival albivioleta.
En efecto, Yáñez y Aravena se bastaron para juguetear con la defensa local y desmontar toda la estrategia de un Valencia donde ni Muñoz Perez solucionó los problemas ni Sánchez Torres entro ni siquiera en juego. Retirado por lesión a los pocos minutos, sería susustituto Sixto el hombre de la noche. La reacción se produciría después de que en el primer periodo el Valladolid se adelantase en el marcador, malograra por falta de ambición alguna otra ocasión y Sempere evitara, providencial, el gol en un penalty que intentó transformar Aravena. Como mal menor, el Valencia se retiró desdibujado con esa mínima derrota parcial para resurgir igual de torpe y desengelado en cuanto a estrategia, pero con una moral y una garra desconocidas. Fue otro equipo, luchador, entregado, veloz, tenaz y afortunado. El ambiente se contagió de ese empuje arrebatador y puso nervioso a un Valladolid que quizá se las prometió demasiado felices. El resultado de todo ello fue una victoria final valencianista, labrada a pulso y que costó sangre, sudor y lágrimas.
Goles: 0-1: Minuto 27. Se cuela Yáñez dentro del área de castigo, burla la salida de Sempere y cede a Eusebio que fusila el gol. 1-1: Minuto 55. Sixto envía a Quique y este es derribado por el defensa visitante Jorge dentro del área. El consiguiente penalty lo transforma Sixto. 2-1: Minuto 83. Jugada muy elaborada de la delantera che que se inicia en Sixto. Salida de Fenoy y el balón que finalmente cabecea Urruti es repelido con la mano por Andruna cuando ya entraba en la portería. El penalty es transformado nuevamente por Sixto.
Resulta obligado hablar de un partido de dos caras y de un Valencia que, no obstante la victoria, parece destinado a sufrir a la vista de sus defectos y de su inexperiencia. Esta vez pudo levantar el partido porque la suerte se alió con el titular del Luis Casanova y provocar en las gradas un falso delirio cuando Sixto transformó el segundo penalty con que fue castigado el Valladolid, pero no hay pasar por alto un primer tiempo deprimente y de idéntico festival albivioleta.
En efecto, Yáñez y Aravena se bastaron para juguetear con la defensa local y desmontar toda la estrategia de un Valencia donde ni Muñoz Perez solucionó los problemas ni Sánchez Torres entro ni siquiera en juego. Retirado por lesión a los pocos minutos, sería susustituto Sixto el hombre de la noche. La reacción se produciría después de que en el primer periodo el Valladolid se adelantase en el marcador, malograra por falta de ambición alguna otra ocasión y Sempere evitara, providencial, el gol en un penalty que intentó transformar Aravena. Como mal menor, el Valencia se retiró desdibujado con esa mínima derrota parcial para resurgir igual de torpe y desengelado en cuanto a estrategia, pero con una moral y una garra desconocidas. Fue otro equipo, luchador, entregado, veloz, tenaz y afortunado. El ambiente se contagió de ese empuje arrebatador y puso nervioso a un Valladolid que quizá se las prometió demasiado felices. El resultado de todo ello fue una victoria final valencianista, labrada a pulso y que costó sangre, sudor y lágrimas.