Inicio del partido

0'

Juliá

7'

Roberto Fernández

12'

Fernando Gómez

20'

MoisésPardeza

24'

García Sanjuán

28'

Gay

29'

Lizarralde

42'

Descanso

45'

LizarraldeJuliá

47'

Gay

50'

Eloy OlayaFernando Giner

66'

Lubo Penev

71'

Moisés

74'

Juan SánchezLeonardo de Araujo

81'

Higuera

88'

Juan SánchezAsist: Álvaro Cervera

90'

Final del partido

91'

El Real Zaragoza jugará la final de Copa frente al Real Madrid. Dos goles de Gay y uno de Higuera doblegaron a un Valencia que abrió y cerró el marcador y nunca se rindió, quiso pero no pudo. De salida, ambos equipos demostraron un respeto mutuo, buscando no cometer errores que les complicaran el encuentro. El Valencia encontró primero el camino del gol. Fue a través de una gran acción de ataque que resolvió Fernando en dos tiempos, tras repeler Cedrún su primer remate. La Romareda enmudeció ante el mazazo levantino.

Pero a partir de ese momento el Zaragoza redobló sus ataques, a pesar de que Pardeza se lesionó. Pardeza es una de las armas ofensivas del Zaragoza, pero Moisés, su sustituto ayer, le suplió con acierto, reforzando además el poderoso juego aéreo blanquillo, con Poyet y Gay de exponentes.

El Zaragoza no tardó en empatar. Fue un bello tanto, a la salida de un córner, firmado por Gay que agarró un testarazo enorme que se coló en las mallas rojas del Valencia sin que Sempere ni sus defensores pudieran evitarlo. A partir de entonces el equipo blanquillo brindó sus mejores minutos y tuvo el segundo gol en un lanzamiento de Poyet que despejó fenomenalmente Sempere y en un tiro de Esteban que desvió el meta del Valencia, cayó el balón desde el cielo y Moisés lo cabeceó al larguero. No acabó ahí el suspense pues el esférico volvió a caer sobre el palo largo y se perdió finalmente fuera entre los ayes del público.

Sin embargo, la afición aragonesa no tardó en explotar después del descanso. A los cinco minutos de la reanudación, Gay acertó con un perfecto disparo que batió a Sempere. Fue el 2-1. Un minuto después, el meta valencianista desvió milagrosamente un testarazo de Moisés a, dos pasos de la línea de gol. El Valencia estaba borrado del campo en esos momentos. Y aunque intentó estirar sus líneas y metió más delanteros estuvo siempre en inferioridad ante un Zaragoza que supo defenderse y contragolpear con peligro.

El final del encuentro fue explosivo. Higuera, el hombre que siempre marca su golito ante los che, no falló tampoco esta vez y culminó por bajo un contragolpe que puso al estadio boca abajo. El 3-1 llevaba cómodamente al Zaragoza para la final, pero el joven Sánchez descontó cerca del final para darle a éste el tono de emoción que merece una semifinal de Copa tan disputada como ésta. El Zaragoza acabó alcanzando su objetivo pidiendo la hora. Como debe ser en el torneo del KO.