Ficha de partido: 19.03.2003: Valencia CF 2 - 1 Arsenal FC

Ficha de partido

Valencia CF
Valencia CF
2 - 1
Arsenal FC
Arsenal FC

Equipos titulares

Timeline del partido

escudo local
Inicio del partido
0'
escudo visitante
Amedeo Carboni
23'
John CarewAsist: Pablo Aimar
34'
Mauricio Pellegrino
37'
Vieira
42'
Descanso
45'
Henry
48'
John CarewAsist: Vicente Rodríguez
56'
Miguel Ángel AnguloJuan Sánchez
67'
Pablo Aimar
67'
Andrés PalopSanti Cañizares
70'
JeffersWiltord
75'
KanuTouré
85'
Carlos MarchenaJohn Carew
88'
Pirés
93'
Final del partido
94'

Estadio



Nombre: Mestalla
Aforo: 55.000 espectadores
Ubicación: Valencia (Valencia) 
Inauguración: 20/05/1923

Rival: Arsenal FC

Records vs Arsenal FC

Máximo goleador: John Carew (3 goles)
Goleador rival: Aubameyang (4 goles)
Mayor victoria: 2 - 0 (08.08.2009)
Mayor derrota: 2 - 4 (09.05.2019)
Más repetido: 0-0 (3 veces)

Crónica

El campeón de Liga español ha entrado en los cuartos de final de la Liga de Campeones por la puerta grande tras un partido épico en el que ha demostrado ser mejor que el Arsenal, su homónimo inglés. Dos goles de Carew han bastado para tumbar a un conjunto tan sobrado de clase como justito de fe. Sin duda, el noruego se erige en el gran protagonista ché de la competición. Las dos victorias de esta segunda fase han llevado su sello. Mestalla ha lucido sus mejores galas para acoger un choque pleno de emoción en el que no ha faltado de nada. Goles, grandes jugadas, entradas duras, lesionados, polémica... la 'Nit de la Cremà' nunca fue tan celebrada en el coliseo valenciano.

Y eso que los primeros petardos fueron ingleses. Henry pudo marcar a los pocos segundos tras un despiste defensivo que arregló, como siempre, Cañizares con una gran estirada. Fueron diez minutos de desconcierto en el que los ingleses camparon a sus anchas por un Mestalla enmudecido. Luego, el partido se equilibró, pero las ocasiones siguieron siendo del Arsenal. En apenas un minuto, Wiltord y Gilberto pudieron abrir el marcador a la media hora de juego. La ocasión del brasileño murió en el larguero tras un despeje milagroso de Vicente con la cabeza bajo palos.

Tanto había perdonado el equipo de Wenger que se cumplió la máxima del fútbol. Un aletargado Aimar apareció a los 35 minutos para asistir a Carew con un pase milimétrico que el noruego no desaprovechó. Un destello del argentino había bastado para desequilibrar el partido. ¡Qué grande Pablito!

Al Valencia le sentó de miedo el tanto. Albelda se agigantaba por momentos y hacía de la brega un arte. Vicente no le iba a la zaga e incordiaba sin cesar a un Lauren abrumado por la clase y casta del canterano ché. Con el partido controlado se llegó al descanso. La segunda parte no pudo empezar peor. Henry se aprovechaba de un balón dividido en el centro del campo para poner la directa, plantarse ante Cañizares y batir con un preciso disparo al meta internacional español. Fue un torpedo en la zona de flotación que el Valencia encajó como los grandes. Si había que recibir un gol, era el mejor momento.

Los hombres de Benítez, plenos de fe y garra, se fueron descaradamente a por el partido. Estaba claro que nadie iba a aguar la fiesta a la ciudad. En menos de diez minutos, la conexión Vicente-Carew había arreglado el desaguisado. El noruego puso a prueba los reflejos de Taylor para ajusticiarlo un minuto después con un cabezazo picado que desató el delirio en Mestalla. Quedaba un mundo, pero el partido era de los españoles. Sólo Henry y ocasionalmente Pirés ponían a prueba a una defensa que esta noche fue la de siempre y rayó a gran altura. Ni la lesión de Cañizares, con una brecha en una ceja tras una entrada a destiempo de Ljungberg, suposo un contratiempo. Ahí estaba Palop, que ya había desquiciado al Arsenal en Highbury. Pero ni se le vio.

No hizo falta. El Valencia supo siempre manejar el partido y dejó que pasaran los minutos sin desdeñar la posibilidad de anotar un tercer tanto. Éste no llegó de milagro y los últimos minutos tocó sufrir. Sobre todo tras una caída de Pirés en el área que el griego Vassaras no estimó como penalti. La entrada de Reveillere seguro que abrirá algún telediario en Inglaterra. Fue una anécdota. El Valencia ganó porque fue mejor y sale airoso de un grupo que respondió con creces a su apelativo de la muerte. El viernes estará en el bombo con la tranquilidad de saber que la vuelta de cuartos se disputará en el fortín de Mestalla. ¡Qué bien quedaría el sonido de las tracas en las calles de Manchester! Ya está más cerca...