Ficha de partido
FC Porto
1 - 2
Valencia CF
Equipos titulares
4
11
Sustituciones
Timeline del partido
Inicio del partido
0'
David Navarro
27'
Rubén BarajaAsist: Curro Torres
31'
Amedeo Carboni
41'
McCarthy
42'
Descanso
45'
Costa
52'
QuaresmaHugo Leal
60'
Marco Di VaioAsist: Vicente Rodríguez
66'
Quaresma
71'
David Albelda
72'
Miguel Ángel MistaMarco Di Vaio
76'
Quaresma
77'
PeixotoMcCarthy
78'
Pablo AimarBernardo Corradi
86'
Final del partido
90'
Estadio
Rival: FC Porto
Records vs FC Porto
Máximo goleador: Emilio Fenoll (3 goles)
Goleador rival: Rui Aguas (2 goles)
Más partidos: Nando Martínez (3 partidos)
Mayor victoria: 3 - 1 (18.04.1948)
Mayor derrota: 1 - 3 (18.10.1989)
Más repetido: 1-1 (1 veces)
Crónica
El Valencia conquistó la Supercopa de Europa y sumó su tercer título del año, tras derrotar al Oporto por 2-1, en un encuentro en el que los españoles supieron manejar mejor el juego y estuvieron más certeros que sus rivales, lo que les permite coronarse como los nuevos reyes del fútbol europeo. El partido se movió desde el inicio por unos derroteros poco vistosos. Pese al cambio de entrenadores, tanto el Oporto como el Valencia mantuvieron casi intacta la personalidad futbolística de sus anteriores técnicos, lo que deparó un encuentro de choque físico y muy táctico, que dificultó las llegadas a una y otra área.
El técnico del Valencia, Claudio Ranieri, apostó por una dupla ofensiva italiana formada por Marco Di Vaio y Bernardo Corradi, que estuvo bien controlada por el eje defensivo portugués, donde el central luso Pepe estuvo inconmensurable en el corte y en los balones aéreos. El Oporto tan sólo inquietaba en las llegadas de los hombres de segunda línea. Carlos Alberto y Costinha fueron los únicos que pusieron a prueba a Santiago Cañizares que resolvió con solvencia las dos únicas aproximaciones del conjunto luso.
El Valencia trataba de imponer ritmo al partido, pero las continuas faltas de unos y otros provocaron que el fútbol se espesara en la zona de creación, por lo que ambos equipos recurrieron a las jugadas a balón parado como argumento ofensivo más eficaz. Sobrepasada la media hora de juego, Rubén Baraja convirtió en oro un centro desde la derecha de Curro Torres y con un espectacular cabezazo colocó el balón en la escuadra de Vitor Baía y situaba en ventaja al campeón de la UEFA.
El partido se puso como le gusta al Valencia. Bien pertrechado atrás dio la posesión al equipo de Víctor Fernández y buscó rápidas salidas al contragolpe, aunque no llegó a cuajar ninguna, por lo que se llegó al descanso con la mínima ventaja de los españoles. El Valencia saltó en la reanudación mucho más centrado que su rival y ofreció su mejor juego durante el primer cuarto de hora, con una buena circulación de balón, buenas aperturas a banda, aunque falló en el último pase lo que le impidió sacar provecho de su mejor juego.
El Oporto se enchufó al encuentro gracias a un error defensivo valencianista, que aprovechó Carlos Alberto para rematar con mucho peligro pero Cañizares respondió con una soberbia parada. El conjunto español volvió a dejar la iniciativa a los portugueses y a buscar la contra para sentenciar, lo que consiguió Di Vaio en el ecuador del segundo periodo al cabecear en el segundo palo un certero centro de Vicente.
Con el 2-0, el equipo español jugó a placer. David Navarro pudo ampliar la cuenta con un remate al larguero, pero fue el ex barcelonista Ricardo Quaresma, nada más salir al campo, el que volvió a dar emoción al encuentro al recortar diferencias con un espectacular disparo desde 25 metros que batió a Cañizares. Sin embargo, los de Ranieri no acusaron el golpe y supieron escribir perfectamente el guión más adecuado en el final del encuentro para sumar su segunda Supercopa de Europa.
El técnico del Valencia, Claudio Ranieri, apostó por una dupla ofensiva italiana formada por Marco Di Vaio y Bernardo Corradi, que estuvo bien controlada por el eje defensivo portugués, donde el central luso Pepe estuvo inconmensurable en el corte y en los balones aéreos. El Oporto tan sólo inquietaba en las llegadas de los hombres de segunda línea. Carlos Alberto y Costinha fueron los únicos que pusieron a prueba a Santiago Cañizares que resolvió con solvencia las dos únicas aproximaciones del conjunto luso.
El Valencia trataba de imponer ritmo al partido, pero las continuas faltas de unos y otros provocaron que el fútbol se espesara en la zona de creación, por lo que ambos equipos recurrieron a las jugadas a balón parado como argumento ofensivo más eficaz. Sobrepasada la media hora de juego, Rubén Baraja convirtió en oro un centro desde la derecha de Curro Torres y con un espectacular cabezazo colocó el balón en la escuadra de Vitor Baía y situaba en ventaja al campeón de la UEFA.
El partido se puso como le gusta al Valencia. Bien pertrechado atrás dio la posesión al equipo de Víctor Fernández y buscó rápidas salidas al contragolpe, aunque no llegó a cuajar ninguna, por lo que se llegó al descanso con la mínima ventaja de los españoles. El Valencia saltó en la reanudación mucho más centrado que su rival y ofreció su mejor juego durante el primer cuarto de hora, con una buena circulación de balón, buenas aperturas a banda, aunque falló en el último pase lo que le impidió sacar provecho de su mejor juego.
El Oporto se enchufó al encuentro gracias a un error defensivo valencianista, que aprovechó Carlos Alberto para rematar con mucho peligro pero Cañizares respondió con una soberbia parada. El conjunto español volvió a dejar la iniciativa a los portugueses y a buscar la contra para sentenciar, lo que consiguió Di Vaio en el ecuador del segundo periodo al cabecear en el segundo palo un certero centro de Vicente.
Con el 2-0, el equipo español jugó a placer. David Navarro pudo ampliar la cuenta con un remate al larguero, pero fue el ex barcelonista Ricardo Quaresma, nada más salir al campo, el que volvió a dar emoción al encuentro al recortar diferencias con un espectacular disparo desde 25 metros que batió a Cañizares. Sin embargo, los de Ranieri no acusaron el golpe y supieron escribir perfectamente el guión más adecuado en el final del encuentro para sumar su segunda Supercopa de Europa.