Ficha de partido
Valencia CF
2 - 0
RCD Espanyol
Equipos titulares
Sustituciones
Timeline del partido
Inicio del partido
0'
Luis Milla
18'
Álex
20'
Javi
33'
Claudio LópezAsist: Cristiano Lucarelli
40'
Tamudo
40'
Amedeo Carboni
41'
Alain Roche
45'
Descanso
45'
Javier FarinósLuis Milla
45'
Nan RiberaÁlex
50'
Soldevilla
53'
Stefan Schwarz
55'
Macanás
57'
Miguel Ángel SoriaAmedeo Carboni
71'
Diego RiberaTamudo
74'
TorrecillaJavi
74'
Claudio López
79'
Cristiano Lucarelli
82'
Sabin IlieClaudio López
84'
De Lucas
90'
Final del partido
91'
Estadio
Rival: RCD Espanyol
Records vs RCD Espanyol
Máximo goleador: Mundo Suárez (21 goles)
Goleador rival: Prat (9 goles)
Más partidos: Juan Ramón Santiago (28 partidos)
Mayor victoria: 4 - 0 (19.10.2003)
Mayor derrota: 0 - 7 (10.06.1928)
Más repetido: 2-1 (25 veces)
Crónica
La final de la Copa Intertoto ya tiene un representante Español. El Valencia, aunque sea por la puerta de atrás, está a un paso de acceder a la Copa de la UEFA y la «culpa» la tiene Claudio López, que ayer volvió a eregirse en el gran protagonista de su equipo.
Ranieri se decidió por un 4-3-3. Sacrificó a Soria en detrimento de Milla para jugar con un triple pivote por delante de la defensa y entregó así el centro del campo al conjunto catalán. El equipo de Paco Flores dispuso de mejores ocasiones en los primeros 45 minutos, «con fe», como anunció el técnico, pero sin acierto. El arma del contragolpe fue, una vez más, el único discurso válido del Valencia. Se repetía el partido de ida en Montjuïc: el Espanyol tenía la posesión del balón y el Valencia, agazapado, confiaba en la inspiración de sus delanteros. El conjunto de Ranieri, con un juego deslavazado, mostraba sus deficiencias, siempre a remolque de un Espanyol más ambicioso, aunque nada efectivo.
Pero en el fútbol quien perdona lo suele pagar muy caro y ayer se cumplió esta máxima. Y tuvo que ser Claudio López, la estrella de la pretemporada valencianista, el que se lo recordara al Espanyol. El argentino controló dentro del área una asistencia de Lucareli, para batir de tiro cruzado a Argensó. El gol del Valencia desencajó al Espanyol. Quien más ganas puso, que no juego, se marchó a los vestuarios con un duro golpe a sus espaldas. En el segundo periodo el Valencia tomó la manija del encuentro. El Espanyol, para entonces, había perdido la concentración y el conjunto de Claudio Ranieri impuso el ritmo del partido sin esconder sus todavía notables carencias. El técnico italiano cambió su sistema y dibujó un 4-4-2 que no impidió que algunos silbidos cruzaran el cielo de Mestalla. Sólo Claudio López hizo más amena la noche, con un gol en jugada individual. Y ya van cinco. Menos mal que Ranieri lo repescó para la Intertoto...
Ranieri se decidió por un 4-3-3. Sacrificó a Soria en detrimento de Milla para jugar con un triple pivote por delante de la defensa y entregó así el centro del campo al conjunto catalán. El equipo de Paco Flores dispuso de mejores ocasiones en los primeros 45 minutos, «con fe», como anunció el técnico, pero sin acierto. El arma del contragolpe fue, una vez más, el único discurso válido del Valencia. Se repetía el partido de ida en Montjuïc: el Espanyol tenía la posesión del balón y el Valencia, agazapado, confiaba en la inspiración de sus delanteros. El conjunto de Ranieri, con un juego deslavazado, mostraba sus deficiencias, siempre a remolque de un Espanyol más ambicioso, aunque nada efectivo.
Pero en el fútbol quien perdona lo suele pagar muy caro y ayer se cumplió esta máxima. Y tuvo que ser Claudio López, la estrella de la pretemporada valencianista, el que se lo recordara al Espanyol. El argentino controló dentro del área una asistencia de Lucareli, para batir de tiro cruzado a Argensó. El gol del Valencia desencajó al Espanyol. Quien más ganas puso, que no juego, se marchó a los vestuarios con un duro golpe a sus espaldas. En el segundo periodo el Valencia tomó la manija del encuentro. El Espanyol, para entonces, había perdido la concentración y el conjunto de Claudio Ranieri impuso el ritmo del partido sin esconder sus todavía notables carencias. El técnico italiano cambió su sistema y dibujó un 4-4-2 que no impidió que algunos silbidos cruzaran el cielo de Mestalla. Sólo Claudio López hizo más amena la noche, con un gol en jugada individual. Y ya van cinco. Menos mal que Ranieri lo repescó para la Intertoto...